Jose Ferrer Clauzel nos deleita con una nueva obra. Esta vez vuelve a Cuba para representar uno de los uniformes más llamativos de la última quincena del siglo XIX. El del Escuadrón de Húsares de la Habana, que era precisamente la única tropa que tenía un uniforme particular, quizá por ello también el más bello.
Del Jose Ferre Clauzel de hoy, destacamos la precisión en las formas, la vida que da a una tela minúscula, las manos, la cara... el gesto junto con una atmósfera típicamente cubana consigue llevarnos más allá... ahí... a las Antillas. La próxima pintura se saldrá de la habitual, ya que hace tiempo recibió el encargo de pintar un jaguar.
Del Jose Ferre Clauzel de hoy, destacamos la precisión en las formas, la vida que da a una tela minúscula, las manos, la cara... el gesto junto con una atmósfera típicamente cubana consigue llevarnos más allá... ahí... a las Antillas. La próxima pintura se saldrá de la habitual, ya que hace tiempo recibió el encargo de pintar un jaguar.
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